España desperdicia más de 600.000 toneladas de plástico al año, así reza el titular de El Diario.es
Unos datos alarmantes que como concluye el investigador del CSIC, Andrés Cózar, en una entrevista al respecto, que suponen una enorme «perdida económica además de ecológica».
Cada trozo de plástico sin reciclar es un desperdicio de energía, de recursos económicos y se convierte en candidato a engrosar las balsas de residuos que se forman en los centros de los océanos. Aunque España es el segundo país europeo que más recicla sus plásticos de uso doméstico, casi la mitad de los objetos cotidianos terminan en vertederos o, directamente, en el medio ambiente. El informe de Cicloplast asegura que «el 100% de los plásticos que se depositan en los contenedores específicos se reciclan». Sin embargo, ¿y todas esos millones de toneladas que no van a los cubos amarillos?.
Todos los océanos tienen grandes acumulaciones de residuos plásticos en su superficie, pero lo que nosotros vemos es una proporción pequeña de lo que entra en el mar porque no es nada sencillo analizar el fondo marino ni lo que termina en los estómagos de la fauna marina. «Todo lo que vemos ahora en las aguas, sin contar con lo que no podemos detectar, es producto de únicamente unos 50 años de uso, muy poco tiempo».
Pero tal y como señalan nuestros compañeros de la Asociación Cultura Permanente, reciclar no es la solución, sino la última solución: es muy contaminante por el transporte y el proceso que sigue, que consume muchísima energía y emite mucho CO2. Ergo: más reutilización y menos reciclaje!!! Además, ya existen muchas soluciones no contaminantes para detener esta barbaridad y dejar de consumir petróleo y que lo hagan nuestros mares.
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